Archivo

Archive for the ‘Guerra’ Category

La verdadera cara de los “libertadores” sirios

Este fin de semana, El País publicaba un artículo más que interesante: <<la Siria rebelde aplica la “sharía”>>, es decir, la ley islámica. Y ponía muchos ejemplos que hacen que la pelusilla de la nuca se erice.

Durante meses, hemos estado escuchando y leyendo artículos en los que se hablaba de los rebeldes sirios como de unos héroes de la libertad y la democracia. Vinculados con los hermanos musulmanes de Egipto, antisemitas y antioccidentes, comienzan a dejar ver su verdadero rostro allí donde llevan más tiempo controlando el territorio.

Es verdad que aún no están aplicando la versión más rígida y estricta de la sahría. Aún no cortan las manos, ni las cabezas, ni permiten o fomentan la lapidación. También es cierto que aún necesitan ganar la batalla mediática y el apoyo de occidente en forma de armas y dinero para continuar su lucha por el dominio total de Siria. Cuando este acabe, y presumiblemente, con su victoria, veremos qué camino siguen, el de la Turquía proeuropea y laica o el del Afganistán de los talibanes y el burka. Como conozco esa zona del planeta, tan bella como salvaje, y sé como las gastan algunas de las facciones que componen las “hordas libertadoras”, me temo que la futura Siria terminará mucho más cerca del fanatismo religioso de lo que nos gustaría a todos.

Al-Assad no es ningún santo. Todo lo contrario. Es un dictador con pocos escrúpulos a la hora de conservar el poder y ningún respeto a los derechos humanos. Pero que él sea malo, no hace buenos a sus enemigos. Nada asegura que la Siria post Al-Assad no sea aún peor que el actual régimen. Más bien, la cosa a punta a lo contrario.

El control de Siria por parte de los grupos más radicales de los hermanos musulmanes, y otras facciones político – religiosas sunís,  significará más dolor para los sirios y mucha más inestabilidad en la zona, con los consiguientes riesgos que eso conlleva para occidente. Por ahora, los juicios contra los militares y funcionarios del régimen de Al-Assad se hacen sin garantías jurídicas de ningún tipo ni abogado que defiendan a los acusados. Es un juicio islámico, con una sola condena: la muerte.

 

Enlace: http://internacional.elpais.com/internacional/2012/08/18/actualidad/1345307170_848427.html

Sobre los hermanos musulmanes: http://paisdeciegos.com/2012/07/25/quienes-son-los-hermanos-musulmanes/

¿Quiénes son los Hermanos Musulmanes?

25/07/2012 2 comentarios

Desde la primavera árabe, y en especial desde los derroteros que tomaron las revueltas en Egipto, el nombre que más se repite en la prensa internacional es el de los Hermanos Musulmanes. Su poder se puede acrecentar aún más en la zona si, al final, triunfa la ofensiva contra el régimen de al-Assad en Siria. Una organización casi desconocida en Europa, pero extraordinariamente influyente en el conjunto de la sociedad musulmana. ¿Quiénes son y que pretenden estos hermanos de fe? Una pregunta que pocos medios de comunicación han intentado responder y que, sin duda, tiene una respuesta compleja y sorprendente.

La organización fue fundada por Hasan al-Banna, considerado por muchos como el padre del islamismo moderno, en 1928, tras la caída del Imperio Otomano. En sus comienzos, se trataba de una organización exclusivamente egipcia, pero muy pronto evolucionó hasta convertirse en una de las más fuertes y poderosas organizaciones panislámicas.

Debemos explicar algunos conceptos asociados al islam que resultan desconocidos en occidente. Umma es la concepción de comunidad o nación de musulmanes; se opone al concepto watan, territorio o nación histórica. Es algo así como la diferencia que existe entre identidad cultural y nación. La identidad cultural puede ser compartida por diferentes naciones y está por encima de las diferencias raciales; la nación está relacionada con el territorio y el establecimiento histórico de fronteras.

Hasan al-Banna, quien formó parte de una cofradía sufí durante algún tiempo, defendió siempre la unidad de la comunidad musulmana por encima de las cuestiones territoriales: al-islam, din-dawla o el islam, religión y estado.

El grupo, no obstante, también era férreo anticomunista. Esto les llevó a defender posiciones ultraliberales en lo económico, ganándose el apoyo de buena parte de la burguesía árabe, y a colaborar con occidente contra los intentos de la Unión Soviética de controlar la región mediante gobiernos títere.

En 1953, por ejemplo, el presidente Eisenhower los recibió en la Casa Blanca. Esta visita oficial era más que simbólica: recibió a los Hermanos Musulmanes durante su primer año de mandato, antes incluso que a presidentes de gobiernos aliados. En aquel momento, eran ya uno de los referentes occidentales en el mundo árabe.

Said Ramadan, un destacado líder histórico de los Hermanos Musulmanes, fue – con probabilidad – agente de la CIA o del M16 británico, encargado de proveer de fondos y equipo a la resistencia egipcia contra Nasser. En aquellos años, la alianza de Jordania, Siria y Egipto había provocado la Guerra de los Seis Días en la que Israel humilló al nacionalismo panárabe. Y Nasser, quien sería considerado un héroe de la Unión Soviética, se había alineado claramente a favor de las dictaduras comunistas y declarado guerra eterna a los judíos.

La posición pro-occidental de los Hermanos Musulmanes le valieron su casi exterminio en Siria. Sin embargo, su mensaje político seguía muy alejado de las democracias occidentales. De hecho, siempre han reivindicado el fin de la influencia occidental en la región. Su lema fue, a partir de esa época y hasta la actualidad, al-islam huwa al-hall o el islam es la solución.

Lo único que unió en el pasado a los Hermanos Musulmanes y occidente fue un enemigo común.  El panarabismo inspirado por Nasser se apoyaba en las ansias de revolución social de los pueblos árabes y gozaba del apoyo de la Unión Soviética. Se apoyaba en un derecho positivo, no estrictamente religioso. La Hermandad Musulmana rechazaba esta deriva comunista y defendía un modelo estrictamente islámico, defendiendo la hudud o parte de la ley islámica – conocida como sharia – dedicada a los delitos “religiosos” como el consumo de alcohol, la fornicación, el adulterio o la blasfemia; partidaria de la Qisas o ley del “ojo por ojo” y de los castigos corporales, en especial los latigazos (ochenta para las acusaciones no probadas de sexo ilícito), amputación (de mano en caso de robo) y lapidación (adulterio).  

Caído el régimen soviético era cuestión de tiempo que también se desmoronasen los regímenes árabes que, aunque en teoría no alineados, habían sido complacientes con los dictados de Moscú. Vieja alianza que, en parte, aún se niega a romperse del todo.

Entre los años setenta y ochenta, la Hermandad Musulmana desarrollo un “estado paralelo” en toda la región del Próximo y Medio Oriente. Un sistema social, sanitario y educativo, que cubría aquellas necesidades a las que no llegaba el Estado. Este modelo de organización, basado en la caridad y la formación religiosa, fue adoptado por Hamás en Palestina, organización a quienes muchos consideran el brazo palestino de los Hermanos Musulmanes.

Durante la década de los 90, se acusó a los Hermanos Musulmanes de los atentados contra objetivos turísticos en Egipto. Pero tras los atentados del 11 de Septiembre, los Hermanos Musulmanes condenaron la violencia y repudiaron públicamente a Bin Laden.

En la actualidad, aseguran que pretenden ser una fuerza política democrática, al estilo de la democracia cristiana europea. Esta declaración de intenciones no es creída por gran parte de la comunidad internacional. A pesar de ser la única fuerza organizada que podría conducir a la región hacia la democracia, existen numerosas incógnitas alrededor de este grupo, sobre su voluntad y objetivo último.

En primer lugar, la propia situación de Siria. A nadie se le escapa que los Hermanos Musulmanes están a favor del derrocamiento de al-Assad y apoyan a las guerrillas insurgentes. Una coincidencia más con occidente, mayoritariamente en contra del régimen sirio, pero que no deja de mostrar el carácter violento y paramilitar que esta organización – o algunas de sus facciones – puede  llegar a desempeñar en los conflictos árabes.

En segundo lugar, y quizás más determinante, sea el aumento de las incursiones en territorio israelí de Hamás desde que los Hermanos Musulmanes se hicieron con el control de Egipto.

Según varios medios israelís, los hermanos Musulmanes habrían pedido a Hamás que atacase Israel, facilitándoles también equipo militar. De hecho, hace pocos días, un escuadrón de Hamás se adentró treinta kilómetros en los territorios de la Franja de Gaza equipados con uniformes de camuflaje, chalecos antibalas y armamento y explosivos militares.

El futuro de los Hermanos Musulmanes está aún por escribir. Todos los esfuerzos de occidente se están centrando en apoyar el proceso egipcio y garantizar la estabilidad en el país. Una transición rápida hacia la democracia y una mejora de la situación económica de Egipto podría ser determinante hacia una transición de los Hermanos Musulmanes hacia posiciones más moderadas y democráticas. El fracaso en Egipto podría, también, reforzar las facciones más integristas del movimiento y provocar un aumento exponencial del islamismo en toda el área.

Europa duerme, como casi siempre, plácida y abstraída del mundo. Como si aquello que está pasando tan cerca de nuestras fronteras no fuera con nosotros. No es de extrañar, basta con darse cuenta de la pasividad hacia los propios problemas para comprender el grado de pasotismo de Europa hacia el resto del mundo, y en especial a los países árabes. El problema es que cualquier cosa que ocurre en el Próximo y Medio Oriente tendrá una rápida repercusión en Europa. Y en relación con los Hermanos Musulmanes, que nadie sea tan ingenuo de creer que es un fenómeno ajeno a Europa. La organización de los Hermanos Musulmanes también está presente en Europa, con especial estructura en Francia, Reino Unido y España.

 

Siria, Irán y el atentado antisemita de Bulgaria

El atentado antisemita sufrido en Bulgaria el pasado 18 de julio es un intento de internacionalizar el conflicto sirio. La posible caída del régimen de Bashar al-Assad está movilizando a sus aliados en la región en un intento de lograr que la guerra civil se convierta en una guerra global en Oriente Medio y Próximo.E

La estrategia no es nueva. Turquía ha tenido que resistir las provocaciones del régimen sirio que ha llegado a derribar a dos aviones turcos de la OTAN, en vuelo sobre aguas internacionales, y atacar a refugiados en las áreas fronterizas, dentro de territorio turco. El gobierno de Turquía, aunque ha optado siempre por la prudencia, se ha visto obligado a fortalecer sus defensas ante un hipotético ataque de Siria, incluso concentrando artillería pesada en la frontera entre ambos estados.

Como esta estrategia de la provocación parece que no está dando resultado, al menos no en la forma que deseaba al-Assad, han sido sus amigos iranís quienes han buscado la confrontación atacando a los ciudadanos israelís.

A los servicios secretos de Europa, Israel y Estados Unidos no le cabe duda sobre la autoría intelectual de la masacre: Qasem Soleimani, comandante de las Fuerzas Qods, fuerza de élite del ejército iraní, integradas en el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, dedicada a las operaciones fuera de territorio iraní.

Habría sido esta división militar del régimen de Ahmadinejad quien, apoyándose en el brazo iraní de Hezbolá, preparó el sangriento atentado. Hezbolá, que en árabe significa <<partido de dios>>, es una organización de origen libanesa, pero con presencia en casi todos los países de la región. Cuenta con un brazo político y otro paramilitar que, a pesar de su origen libio, se formaron en el islamismo chiita de Jomeini durante la Revolución Islámica de Irán.

Este grupo terrorista ha mantenido siempre una estrecha relación con el régimen de Irán y los alawitas sirios, minoría del país a la que pertenece al-Assad y que controla el gobierno y el ejercito de este país islámico. Su irrupción en el conflicto supone una clara apuesta de los regímenes iraní y sirio por arrastrar a toda la región hacia un conflicto armado de consecuencias impredecibles, probablemente de alcance global.

El atentado de Bulgaria supone, también, la confirmación de las sospechas sobre la infiltración del terrorismo islamista en este país. El embajador de EE.UU, John Beyrle, expresó su preocupación por la situación en 2005: <<el aumento del desempleo, la debilidad de las instituciones que promueven el islam moderado y una discriminación de larga data hacen a los musulmanes búlgaros vulnerables al extremismo>>. De hecho, el pasado mes de junio, fueron detenidas 13 personas al sur de Bulgaria por pertenencia a un célula terrorista salafista.

Desde este país se han intentado organizar también en otros estados vecinos, como en Checoslovaquia, donde la policía también detuvo a dos búlgaros de origen musulmán vinculados con Hezbolá, sospechosos de tráfico de armas y explosivos desde el Cáucaso ruso. En esta región, en concreto en Tatarstán (Cáucaso norte), los islamistas asesinaron recientemente al muftí moderado, IIdus Faizov. En el crimen estuvo implicado un empresario que organizaba peregrinaciones a la Meca; todo indica que era una manera de financiar y blanquear fondos para la yihad a la que se opuso el muftí, razón que le costó la vida.

La situación se vuelve, cada día que pasa, en más peligrosa e explosiva. El auge de los Hermanos Musulmanes (aunque tradicionalmente opuestos al régimen sirio, tienen como referente en Palestina a Hamás), un grupo fundamentalista y panislamista; la caída de antiguos regímenes, sin que exista una clara voluntad en los opositores de instaurar una democracia o un acercamiento progresivo a occidente; y el recrudecimiento de las acciones terroristas con la finalidad de provocar a Turquía, Israel y Europa puede terminar por provocar un largo y cruel conflicto en la zona.

Israel debe evitar caer en las provocaciones y apoyarse en el Derecho Internacional para hacer valer la justicia en estos atentados que está sufriendo. Europa debe sus deberes y actuar con mayor contundencia contra los grupos islamistas, tanto salafistas como chiita, que operan en nuestro territorio. Debe perseguir con idéntica determinación tanto a las células terroristas cómo a las estructuras logísticas, financieras y a la propaganda yihadista. No hacerlo implicará gravísimos problemas en el futuro. Un futuro quizás muy cercano, a la vista de los esfuerzos de Hezbolá por traer el conflicto sirio a Europa. 

Justicia a la memoria de los de Alcántara

21/06/2012 2 comentarios

Noventa y un años ha tardado España en reconocer el valor de los héroes de la batalla de Annual. Ni Franco ni Chacón quisieron conceder la Laureada de San Fernando a quienes lucharon en la locura de un rey inepto y unos políticos corruptos. Como si los soldados y oficiales que desparramaron sus tripas en África fueran culpables del único mal constante en la historia de España: sus gobernantes lelos y corruptos, especie autóctona de la que tenemos de sobra en nuestro país.

Una parte de la izquierda masculla con rabia, como si premiar el valor fuese de derechas o de izquierdas. ¡Cuánto tenemos aún que aprender! Y la derecha se engalana con banderitas, luciendo el patriotismo hortera de siempre, coartada de zoquetes y escondite para caraduras. Vergüenza los del PSOE, Vergüenza los del PP; los dos han gobernado y ninguno quiso encontrar tiempo para premiar a los paisanos que lucharon en una guerra que ni les iba ni les venía. Ya tienen todos algo en común con Franco.

Y lucharon. Joder si lucharon. Cagaron guerra aquel día. No lo hicieron por el rey, ni por España, lo hicieron por sus compañeros. Por aquel que sufría la lluvia de plomo a su lado y no te dejaba solo, sino que hombro con hombro embestía al enemigo.

Para quien no lo sepa, todo ocurrió en el verano de 1921. Andaban los moros sublevados y dirigidos por el sanguinario Abd El-Krim. Los españoles avanzaron hacia el enemigo, llevando a su lado a unos aliados marroquíes, pero cuando la cosa se puso dura, los moros cambiaron de bando y comenzaron a masacrar a las tropas españolas.

Muchas posiciones quedaron aisladas, sin posibilidad de obtener ayuda, con los cadáveres de sus compañeros sirviéndoles de parapeto. Así ocurrió en Igueriben. Todos muertos.

Salen las tropas que estaban en Melilla para auxiliar a los suyos. Salen con todo. Es decir, con unos huevos de acero, porque otra cosa no había. Ni botas los soldados. Malos fusiles y pocas balas. Los refuerzos y suministros tantas veces pedidos a la península siempre habían sido negados. Iban a morir. Pero salieron con todo. O sea, con su coraje y una plegaria.

Los soldados españoles se tienen que retirar, pero faltan vehículos y oficiales que organicen el repliegue. Aquello se vuelve un infierno. Incluso estallan rifirrafes entre los propios soldados por lograr espacio en un vehículo y poder salvar el pellejo.

La retirada se vuelve estampida. Miles de hombres van quedando atrás, abandonados a su suerte. Los moros del Rif avanzan. Tras ellos, sus mujeres, torturando y rematando a los heridos españoles. Les arrancaban las muelas para hacerse con el oro de las fundas cuando aún estaban vivos. Les sacaban los ojos, mutilaban y abrían el vientre con las curvas gumías. Una vez se divertían con los cautivos heridos, los desmembraban y arrastraban los trozos de sus cuerpos.

Es entonces cuando entran en juego nuestros héroes, los del 14 de caballería de Alcántara. Les toca defender la retirada de sus compañeros. Van a morir, todos lo saben. Pero no se arrugan. En el cruce seco del río Igán deciden frenar a los sanguinarios moros. Ya los conocen, llevan todo el día cargando contra ellos y enredándose en cruentas escaramuzas.

Siete veces cargan los de Alcántara. Colina arriba. Sable en mano. Tras cada ataque vuelven a reagruparse. No hay descanso. Los caballos están exhaustos y las últimas cargas se hacen al paso, pues no quedan fuerzas para el trote.

Las balas se acaban. La última carga se hace a pié y con sólo sables contra los fusiles y cañones moros. No quedan oficiales; son los veterinarios, el capellán y  un teniente médico que no tenía obligación de subir la colina quienes encabezan a los guerreros. Por sus suyos,  por los compañeros que necesitan tiempo para lograr refugio seguro de las hordas rifeñas.

De los 691 valientes que componían el regimiento sólo sobreviven 67. Nadie los podrá llamar jamás cobardes. Heridos y maltrechos se repliegan ante el acoso de los moros. Han cumplido su misión. Nadie les cubre a ellos.

8.000 soldados españoles murieron aquel día. Todo Monte Arruit repleto de cadáveres sin nadie que les dé sepultura. Los muertos son saqueados y profanados. Allí quedarán como pasto de las alimañas. Allí durante días y días.

El rey suspendió sus vacaciones y accedió a enviar tropas de refuerzo a las plazas de Ceuta y Melilla. Algunos historiados dicen que esta batalla marcó el fin de la restauración. No lo sé, pero merecido lo tenía.

Noventa y años han transcurrido para que un gobierno se acuerde aquellos hombres de Alcántara, y ha sido con una medalla colectiva y no con el reconocimiento del valor de cada uno. Aún hay quien considera que esta condecoración sobra, o que obedece a segundas intenciones.

Dicen que con la medalla, el gobierno quiere alentar el patriotismo para tapar sus propias vergüenzas. Quizás sea cierto. Pero no escribo estas palabras por culpa del gobierno; escribo contra quienes no reconocieron el valor y el mérito cuando tuvieron la oportunidad de hacerlo; escribo indignado con quienes usan, a favor o en contra del gobierno, la memoria de aquellos valientes; escribo, en fin, contra los cobardes, porque sólo los cobardes, los necios y los hipócritas son incapaces de reconocer la valentía. 

La Guerra del Vaticano

29/05/2012 1 comentario

Hace ya meses que tenemos noticia de una lucha sin cuartel por el control del Vaticano. Las distintas familias que crecieron bajo el ala protectora de Juan Pablo II y su largo papado, compiten por cuotas de poder en la Santa Sede. Todos tienen en mente una próxima sucesión de Benedicto XVI.

 La última escaramuza de esta guerra ha sido la detención de Paolo Gabriele, el mayordomo del Papa. Se le acusa de ser la fuente que ha permitido al periodista italiano Gianluigi Nuzzi desvelar muchos de los secretos que se ocultan tras los muros que rodean la Plaza de San Pedro.

El periodista sostiene que nunca pagó a su confidente, y que tanto él como su informador, tenían como único objetivo ayudar a la Iglesia denunciando la corrupción que acampa en los escalones próximos al Santo Padre.

Intenciones a un lado, lo cierto es que las noticias que se han ido desvelando los últimos meses, han puesto en serias dificultades a altos cargos de la Iglesia.  Complot para acabar con la vida de Ratzinger si éste no decide dimitir pronto incluido, la información que se ha conocido gracias a este y otros periodistas italianos pone en cuestión la imagen de santidad de la institución religiosa más poderosa del mundo.

La destitución de quien fuera hombre fuerte del Instituto para las Obras de Religión, más conocido como Banca Vaticana, demuestra también el grado de beligerancia que existe entre la Curia y las distintas facciones que desean repartirse el pastel Vaticano. ¿Fue destituido Ettore Gotti Tedeschi, expresidente del IOR, por exigir mayor transparencia en las cuentas o por la investigación que conduce la Fiscalía Italiana por supuestos delitos de Blanqueo de Capitales? Nadie lo puede saber con certeza, pero la Iglesia Católica no queda en buen lugar en cualquier caso.

El Papa, como dice el L`Observatore Romano, vive rodeado de lobos. Paradójicamente, sus enemigos son hoy los mismos que en su tiempo lo apoyaron, aquellos grupos religiosos y laicos que crecieron gracias a la sutil pero firme destrucción de facto del Concilio Vaticano II, destrucción en la que él participó activamente cuando estaba al frente de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Un proceso que apuntaló los pilares más conservadores de la Iglesia en detrimento de las corrientes más progresistas y el cristianismo de base.

¿Pero quiénes componen las facciones en liza? Resulta difícil señalar con el dedo a unos y otros, pues si algo tiene la Iglesia y sus purpurados es capacidad camaleónica. Los cardenales, nuncios, arzobispos y premieres de las grandes Órdenes de la Iglesia cambian de bando constantemente y según sus propios y personales intereses. Podemos señalar, no obstante, que pesa en el ánimo de muchos que el sillón de Pedro no esté ocupado por un italiano desde 1978. Muchos piensan que ya va siendo hora que el Espiritu Santo se pose de una bendita vez sobre un cardenal italiano.

El poder logrado en las últimas décadas por sociedades católicas como la de los Legionarios de Cristo o el Opus Dei, tiene de los nervios a instituciones religiosas más antiguas, que ven en las nuevas órdenes a unos advenedizos oportunistas, ahijados consentidos del anterior Papa, con muchos menos derechos y capacidad que ellos.

Tampoco falta quienes están preocupados por la deriva ultraconservadora de la Iglesia. Piensan que el movimiento de desobediencia surgido en países como Austria o Irlanda, puede terminar provocando un cisma si la Iglesia no es capaz de adecuar el mensaje de Cristo a los tiempos presentes. Esta facción, la más progresista, la cual abandera el Evangelio sobre la Doctrina de la Iglesia, se siente ninguneada en extremo. Saben que tienen el mayor peso social de la Iglesia, pero sin embargo, están marginados en los centros de decisión.

Malos tiempos corren para la Iglesia y para un Papa anciano y enfermo, un hombre que sufre la soledad del poder y se siente, según se indican las fuentes vaticanas, golpeado y triste. No es para menos: los lobos nunca se apiadan de sus presas. 

Siria, ¿otra vergüenza de la Comunidad Internacional?

29/05/2012 1 comentario

La extrema brutalidad del régimen de El Asad sigue causando miles de muertos y heridos entre la población civil. La última masacre ha causado la muerte de un centenar de personas, entre las que se cuentan más de treinta niños.

El propio Secretario General de las Naciones Unidas, el surcoreano Ban Ki-moon, ha reconocido <<que se bombardean vecindarios de forma indiscriminada, que se emplean hospitales como centros de tortura, que se abusa de niños de 10 años, etcétera. Se trata, con absoluta certeza, de crímenes contra la humanidad>>. Sin embargo, la comunidad internacional, sigue mirando hacia otro lado, limitando su actuación a declaraciones oficiales de consternación y repulsa.

La actitud de los países occidentales recuerda el vergonzoso papel protagonizado por la ONU en conflictos como el que asoló Bosnia y Herzegovina.  Son muchos los que se preguntan si la negación de Rusia es realmente un freno para tomar medidas contundentes contra el régimen dictatorial sirio o solo una excusa. De lo que podemos estar seguros es que si, al final, la comunidad internacional se ve obligada a reaccionar, no será por propia iniciativa, sino forzada por una opinión pública cada vez más indignada ante el papel pasivo de sus líderes.

¿Crisis del Estado del Bienestar?

En los últimos años hemos pasado del estado del bienestar al estado del medio estar, y por último, a raíz de la crisis, al malestar. ¿Estamos asistiendo al fin del Estado del Bienestar? ¿Es inviable, económicamente hablando, el modelo social europeo?

Tengamos algo en cuenta: el Estado del Bienestar se implementó tras la II Guerra Mundial. Resulta absurdo plantear que lo que fue posible en la Europa destruida y arruinada por la guerra no pueda ser financiado en la actualidad.

No es el Estado del Bienestar el que está en crisis, lo que está en crisis son los valores que lo impulsaron. La socialdemocracia europea, como gran parte de la izquierda, ha bajado los brazos, reduciendo las diferencias ideológicas con la derecha a unas pocas cuestiones marginales y a temas más de estética que de ética.

La socialdemocracia europea debe rearmarse ideológicamente, retomar un nuevo discurso acorde con los tiempos y recuperar aquellos valores que inspiraron el desarrollo del Estado del Bienestar. 

Tambores de guerra

17/01/2012 1 comentario

Suenan tambores de guerra en los despachos más influyentes del mundo. Sin duda es aún un sonido lejano, pero demasiado persistente como para negar su ritmo. En las últimas jornadas se han escuchado afirmaciones muy duras, sentencias que hacen creíble la hipótesis de una próxima y casi segura guerra entre USA e Irán.

Mientras los medios de comunicación europeos, y más especialmente los españoles, solo tienen ojos para los asuntos internos y la persistente crisis económica, el mundo ha seguido girando encaminándose hacia un conflicto armado de consecuencias impredecibles.

En Estados Unidos, por el contrario, las tensiones con Irán son cuestión recurrente en la prensa diaria, y un asunto de seguridad nacional que preocupa – y preocupa mucho – a los americanos. Prueba de ello es que durante las primarias del Partido Republicano, todos los candidatos se han visto obligados a tomar una postura oficial respecto al conflicto, coincidiendo en la disposición de entrar en guerra si continúan las pretensiones bélicas del programa nuclear del país árabe. A EE.UU. no le temblará el pulso para hacer lo que debe hacer, es una de las frases más repetidas.

Obama, quien se ha mostrado mucho menos pacifista de lo que prometía en un principio, también parece dispuesto a llegar hasta el final. Razones electorales le impulsan a mostrarse como el Comandante y Jefe, pero también su propia convicción y las presiones de Israel hacen que el actual inquilino de la Casa Blanca se incline hacia la acción militar.

De hecho, los tambores de guerra son tan reales que la guerra secreta que precede a todo conflicto abierto hace muchos meses que comenzó. La CIA y el Mossad, con el apoyo del MI6, llevan operando con contundencia desde hace bastante tiempo.

Asesinatos selectivos, ciberataques y sabotajes son práctica habitual de los servicios secretos con influencia en la zona. Uno de los grandes éxitos  del espionaje occidental ha sido reclutar a los milicianos del MEK (muyahidines del pueblo de Irán) para las acciones de guerrilla dentro del territorio iraní en una estrategia de sabotaje masivo.

Con todo, y quizás para mostrar la disponibilidad a una solución pactada al conflicto, USA e Israel han aplazado las maniobras conjuntas que tenían previstas para el mes de abril. Una luz de esperanza que no termina de dispar las tinieblas de un nuevo y sangriento conflicto, ni detendrá la guerra oculta que libran los servicios secretos de cada bando desde hace meses. 

Campaña de la Armada Americana

Campaña de la Armada Americana